Cuán desdichada es la pobre niña rica.
Cómo no se van a saltar las cuerdas de mi guitarra. No ya porque no estés..sino porque yo no estoy.
Adicta a los perfumes, cámaras, espejos.
Estamos aquí para pasarlo bien y para ordenarnos.
Si anochece antes, será por algo. Pero si se me derrama el café, es que me estoy descontrolando.